La verdad es que... BAIE 19 debería haberse llamado Agua 19. No es que no huela a nada (aunque nada huele como él), pero tiene este efecto fresco, húmedo y empapado que el agua da a la tierra después de llover...
Y de hecho, hay una palabra para eso: petricor. Es esa sensación mágica durante una gran lluvia después de una temporada de sequía, y es uno de los fenómenos olfativos más hermosos de la naturaleza.
Hay muchas razones para esto, incluyendo el ozono en el aire, los iones negativos; pero lo más importante, la liberación de secreciones de aceite de ciertas plantas, acumuladas durante un largo periodo seco. Así es BAIE 19: baya de enebro seca, pachulí, hojas verdes... todo bañado por una hermosa, luminosa y magnética lluvia después de una larga sequía. Y la alegría que viene con ella...